Los inhibidores del cotransportador de sodio-glucosa 2 (SGLT2) son una clase de medicamentos utilizados en el tratamiento de la diabetes tipo 2. Funcionan al bloquear la reabsorción de glucosa en los riñones, lo que lleva a una mayor eliminación de glucosa a través de la orina y, por lo tanto, a una reducción de los niveles de glucosa en sangre.
Estos medicamentos ofrecen varios beneficios adicionales más allá del control glucémico, incluyendo la reducción de peso, la disminución de la presión arterial y la protección cardiovascular. Algunos ejemplos de inhibidores de SGLT2 incluyen la dapagliflozina, la empagliflozina y la canagliflozina.
En la clínica, los inhibidores de SGLT2 se utilizan comúnmente como parte del tratamiento integral de la diabetes tipo 2, tanto en monoterapia como en combinación con otros medicamentos antidiabéticos como las sulfonilureas, los inhibidores de la dipeptidil peptidasa 4 (DPP-4), las tiazolidinedionas o la insulina. También se están investigando en pacientes con enfermedades cardiovasculares, ya que se ha demostrado que reducen el riesgo de eventos cardiovasculares mayores en personas con diabetes tipo 2 y enfermedad cardiovascular establecida.
Sin embargo, como con cualquier medicamento, existen efectos secundarios potenciales asociados con los inhibidores de SGLT2, incluyendo infecciones del tracto urinario, infecciones genitales, deshidratación, hipotensión ortostática y cetoacidosis euglucémica, una complicación metabólica poco común pero potencialmente grave. Por lo tanto, es importante que los pacientes sean supervisados de cerca por un profesional de la salud al tomar estos medicamentos.
Accede al episodio completo en nuestras plataformas podcast de Universidad Médica